domingo, 15 de marzo de 2020

Aún más abusos de Ricardo Zúñiga Miramontes en el albergue CADIPSI DIF Guadalajara - Marzo 06, 2020 - Audio

Por Roberto Patrón Zepeda

Última actualización: Martes 17 de marzo de 2020, 04:02 p. m.


Cuando llegué al albergue CADIPSI del DIF* GDL esta noche, 06 de marzo de 2020, Ricardo Zúñiga Miramontes me dijo que no podía entrar, todavía...

* Qué significa, a veces, DIF: "Desarrollo Integral de la Familia".

Inicio de esta grabación de audio: 19:52:38 am
Duración: 03:23:43 horas

Esta noche estuvieron, como encargados, Ricardo y Diana, y el policía fue un señor nuevo allí, o que al menos yo nunca había visto, y que es reemplazo del policía que en una ocasión anterior, el 08 de febrero de este año, falsamente dijo que había un antecedente, en mi contra, por el cual el que trataba de justificar los abusivos malos tratos que Frania Gutiérrez Rodríguez me estaba dando.

Al respecto, véase mi publicación del audio:

Múltiples abusos cometidos por el albergue CADIPSI en Guadalajara, Jalisco - Feb-08-2020 - Audio 2

Al inicio de esta grabación, camino hacia el CADIPSI. Luego me formo en la fila para entrar.

En el minuto 12:58 de esta grabación, cuando es mi turno para entrar, Ricardo me dice: "Roberto, aguántanos afuera, por favor". Enseguida salgo de la fila y espero a que entren todos los demás.

Mientras tanto, platico con un inquilino nuevo, llamado Ólmar.

34:59.0 - 35:06.0 Ricardo sale y me dice "Ahorita lo pasamos, Roberto. Va a pasar con el licenciado Francisco. Dice que quiere platicar con usted, por su actitud".

El "licenciado Francisco" (Francisco José Preciado López) es el "psicólogo" del CADIPSI, un muchacho de quien casi todos los inquilinos que han estado en este albergue hablan con desprecio, por la forma prepotente con que acostumbra tratar a muchos; y es "amigo", cómplice, de Ricardo Zúñiga Miramontes, con quien comparte el gusto por los tatuajes; y al cual, cuando se trata de ello, se le identifica inmediatamente con sólo decir que "siempre", o "casi siempre", anda en bermudas (pantalón corto) para exhibir los tatuajes que trae en las piernas.

42:34.5 Ricardo me dice que pase. Y entro.

42:46.1 - 42:49.3 Me dice que no le dé el tarjetón (contrariamente a lo acostumbrado en cada inquilino al llegar) y que pase a hablar con Francisco: "No me des tu tarjetón, y pásate con el puro tarjetón, por favor".

42:56.8 Comienzo a hablar con Francisco. Me dice que le explique lo que el miércoles sucedió con su compañero (Ricardo).

En una parte de esta grabación digo que lamentablemente Adrián (Sarmiento Carrillo) ya no está en el albergue, en referencia solamente a que en parte por ello él ya no podría en el momento presente testificar en cuanto a los muchos abusos que Ricardo Zúñiga cometió también en su contra, pese a que Adrián y su esposa, como antes he dicho y publicado (en otros audios), no deberían continuar ya en el albergue, por estar allí pasando vacaciones únicamente, sin necesitarlo en realidad, como en muchos otros casos de inquilinos que allí ha habido.

Además, en realidad Adrián nunca mostró interés en reportar esos abusos, y esto es más precisamente lo lamentable, porque hizo cuanto pudo, indebidamente, por complacer a todos, especialmente a los abusivos y a los con mayor autoridad, incluyendo a Ricardo tras los abusos de éste.

Pero hice y conservo grabaciones de audio en que Adrián se queja en detalle de malos tratos que padeció por parte de Ricardo, que también publicaré.

En esta conversación, Francisco Preciado defiende a su cómplice Ricardo Zúñiga Miramontes con una larga serie de enormes mentiras; diciendo, por ejemplo, que las grandes cantidades de comida que se quedan y desaparecen en los turnos de los encargados Ricardo Zúñiga Miramontes, Diana Patricia Pérez Cortez, Frania Gutiérrez Rodríguez y Francisco Javier Díaz Balvier, son para donarlas.

Lo cual no sólo no mencionó Ricardo cuando yo aquél día le señalé esa arbitraria desaparición, porque éste no había todavía considerado tal mentira como una supuesta posible salida, ante una observación como la que yo sí me atreví a hacerle, para su sorpresa, sino que además Teresa Aguiñaga Martínez y Carlos Ortiz Longoria (otros de los encargados en el CADIPSI Revolución) luego han desmentido rotundamente que eso sea cierto, como también probaré muy pronto.

1:14:19.0 Termina esta discusión sobre corrupción.

De allí voy al escritorio en que Ricardo está para que éste anote mi llegada. Y Ricardo me dice que ya puedo pasar a bañarme, en lugar de decirme que puedo pasar a cenar antes de bañarme, como en otras ocasiones él mismo ha permitido cuando ya es tarde, como lo es ya en este caso por esa abusiva postergación que él mismo me impuso.

E incluso me dice, en respuesta a mi pregunta, que "en esta ocasión no" lo permite.

Subo al dormitorio por la toalla para bañarme, y me doy cuenta de que ya no está, otra vez; seguramente porque Ricardo, por tercera vez, me la quitó por mis reportes de sus abusos.

Regreso y digo a Ricardo que "otra vez se me desapareció la toalla".

1:18:39 Ricardo al respecto me dice: "Lo que puedo hacer yo para socavar o subsanar eso, pues...".

Enseguida voy a bañarme, sin la toalla.

Mientras me estoy bañando, entra Ricardo al baño, dice algo en voz alta, apaga la bomba de agua y se va.

Luego de eso casi no sale nada de agua por las regaderas, y me baño con extrema lentitud, con un chorro muy delgado.

1:50:30 Termino de bañarme y salgo del baño.

1:51:29 Pregunto a Ricardo si "el licenciado Jorge" (el director del albergue) está. Y me contesta "Se encuentra ocupado".

Me extrañó mucho saber que, Jorge López Ramírez, si estuviera esta noche, puesto que casi nunca va al albergue, ni siquiera por la noche.

También fue muy notorio y significativo el hecho de que después de la llegada de Jorge López al albergue esta noche, la voz de Ricardo cobró mucha mayor seguridad y rispidez, por saberlo aliado suyo, de la corrupción y la holgazanería.

1:52:05 - 1:52:17 Al verme parado cerca, Ricardo me pregunta ásperamente: "¿Qué se le ofrece, Roberto?" Le contesto: "Lo voy a esperar; al licenciado Jorge" Y en tono molesto, impaciente y menospreciativo Ricardo me responde: "Lo va a esperar... Ah, tome asiento". Como descartando por completo que lo que yo diga al muy corrupto Jorge Ramón López Ramírez pueda servir de algo en beneficio de la honestidad.

Mientras tanto, el nuevo policía estaba escuchando sentado muy cerca, como a metro y medio de donde Ricardo y yo estábamos. Esto es importante mencionar, por lo que más adelante este policía dice, con toda decisión, corrupción e ignorancia, en defensa de Ricardo.

Me siento en una de las sillas del comedor, que está cerca de allí.

Después de bañarme, por haberme quedado al final por esa abusiva postergación que Ricardo y Francisco me impusieron, no hay más que un plato en la mesa en que Diana Pérez sirvió para quienes faltaran de cenar, puesto que ya nada más faltaba yo.

Obviamente, ante gente tan vil como ellos han probado ser múltiples veces, no se puede cometer la ingenuidad de aceptar un plato de comida, de ese modo, personalizado.

2:02:56 - 2:03:19 Pregunto a Ricardo como a qué hora se va "el licenciado Jorge". Y me responde: "Mmmm. Desconozco, Roberto. No tiene un hora. Desconozco. No tengo ese dato". E insiste más en ello. Le pregunto si puede avisarle que estoy allí. Y me responde que enseguida que se desocupe.

2:03:21 Otro inquilino, asomándose desde la puerta del baño, que está a unos cinco metros de donde Ricardo está, pregunta a éste si puede encender la bomba de agua, para poderse bañar. Y Ricardo responde: "¿Ya no hay agua? Sí, préndela, préndela poquito". 

2:05:27.0 El policía pone música a volumen alto.

2:11:51 Me dirijo hacia el cuarto de baño a hacer el aseo y Ricardo comienza a cantar, en voz alta. Cuando entro al baño, se escucha que la bomba de agua está encendida.

Hago el aseo en los baños, al tiempo que platico con Ólmar, otro de los inquilinos.

2:21:45 Llevando una cubeta, salgo de los baños y voy a donde están el aromatizante y, cuando llega a haberlo, el cloro, a un lado de donde Ricardo está sentado.

2:22:01 Echo aromatizante a la cubeta.

2:22:08 El policía otra vez enciende música a volumen alto.

2:22:20 Escépticamente, pregunto a Ricardo si no hay cloro. Y, en tono muy distinto, me responde que no.

Cloro no ha habido desde hace semanas, pese a que algunos de los encargados, cuando menos Teresa Aguiñaga y Carlos Ortiz Longoria, lo han pedido reiteradamente al susodicho director Jorge López, sin que éste haya atendido en absoluto la petición.

Por esto la diferencia en el tono con que Ricardo respondió a mi pregunta al respecto, porque es para todos allí evidente que la responsabilidad de esta carencia es de su aliado el igualmente ultracorrupto y ultraharagán Jorge Ramón López Ramírez.

Regreso a seguir aseando los baños.

2:44:51 Ricardo entra al baño cuando yo estoy terminando de hacer el aseo y me dice que ya salió (de su oficina) "el licenciado Jorge" y que me está esperando. Enseguida salgo de los baños a hablar con él también sobre algunos de los problemas.

Pero Jorge esta vez no me invita a pasar a su opulenta y enorme oficina, que contrasta con los baños y los dormitorios, de los cuales he publicado más de 1000 fotos y videos en Los asquerosos engendros de la enorme corrupción en el albergue CADIPSI DIF Guadalajara, y es del doble del tamaño de cualquiera de los dos dormitorios de 8 personas cada uno en este albergue, a pesar de que esa oficina está casi siempre vacía, porque Jorge López Ramírez casi nunca está en ella (ni en ningún otro lugar dentro del albergue que supuestamente dirige); cuando menos no en las horas en que los inquilinos estamos o estamos despiertos, esto es, dentro del horario que por reglamento se permite allí a los inquilinos continuar afuera de los dormitorios.

Casi nunca, en otras palabras, dentro de un horario en que los inquilinos logremos encontrarnos al escurridizo Jorge López para decirle o preguntarle algo, porque, además, casi siempre que llega a aparecerse por allí se encierra de inmediato en su oficina y sale de ella nada más para inmediatamente irse del albergue.

En lugar de ello, Jorge López prefirió que platicáramos todos juntos, lo cual me pareció apropiado, pese a que este es otro de los motivos por los que ellos cuatro (Ricardo, Diana, Jorge y hasta el policía; Francisco prefirió ya no meterse) se sentían tan confiados en discutir esta parte de la problemática conmigo solo.

Eso fue excelente, para los fines de publicación de pruebas de la descarada corrupción que en este albergue reina, y de la vil naturaleza de estos cuatro cómplices; cinco, contando a Francisco Preciado, el "psicólogo" con que un rato antes también tuve que discutir respecto a los robos que en el CADIPSI casi a diario (cinco o seis días a la semana) vemos todos los inquilinos que se cometen en abundancia y extremo descaro.

2:45:30 Comienzo a platicar ante ellos, de manera muy resumida, algunos de los problemas, que son mucho mayores y más numerosos en realidad.

3:21:08 El corruptísimo Jorge Ramírez da por terminada la discusión.

Voy a escribir y publicar mucho más respecto a todo esto.

Estoy actualmente añadiendo también muchos otros archivos respecto a todo esto y muchos otros de los problemas de corrupción en el DIF Guadalajara y el CADIPSI. Y voy ya a compartirlo tan extensamente como se requiera.

1 comentario:

  1. Cuidate mucho Roberto...para mi siempre eres y seras un ser extraordinario...

    ResponderBorrar